martes, 28 de septiembre de 2021
SINOPSIS: Él quiere desenmascarar a la que creía una timadora.
Ella se resiste a contarle su secreto.
¿Qué camino tomar cuándo la pasión se interpone? ¿Se puede traicionar al corazón?
Sabrina Klever nunca pensó que, cuando todo le había dado la espalda, el conde de Lancashire la salvaría. Tampoco imaginó que casi seis años después se encontraría, cara a cara, con el último hombre al que hubiera deseado volver a ver: el barón de Sheringham, que acaba de regresar de la guerra contra Napoleón.
El barón de Sheringham ha regresado con el único deseo de olvidar los horrores de la guerra. Lo único que le ha mantenido cuerdo ha sido evocar unos ojos violetas que lo atan a un pasado feliz, antes de conocer la furia de un tiempo de sangre y muerte.
Sin embargo, cuando encuentra a Sabrina viviendo en casa de su abuelo y a pesar de la profunda atracción que siente por ella, no está dispuesto a que manejen sus sentimientos. Su misión es otra: desenmascarar a la mujer que pretende quedarse con parte de su patrimonio. Aunque para ello tenga que renunciar a la pasión.
RESEÑA:
Cuándo me decanté por la serie "un romance en Lóndres" para continuar el maratón de lecturas de Nieves Hidalgo lo hice, no sólo porque estaba el pack de todos los libros de la serie en oferta en Amazon, si no también porque sabía que no me iba a defraudar. Pero lo cierto es que ha superado mis expectativas pues me está resultando absolutamente deliciosa. Sus encantadoras portadas, la ambientación, la descripción de los escenarios, la personalidad de sus personajes y, por supuesto, los romances de cada uno de los amigos, está consiguiendo que la lectura no sólo sea amena y maravillosa, si no también adictiva. Si no fuera por que tengo tanta lectura retrasada que me tengo que leer los libros a pares, habría devorado los cinco libros hace ya tiempo. Realmente son maravillosos.
Pero comencemos por el principio: la portada. Al igual que las dos novelas anteriores, me ha parecido un acierto total. Igual de romántica, delicada y bonita que las anteriores ésta, además, evoca el paisaje que la autora describe cuándo hace referencia a la Mansión familiar, lo que me parece magnífico ya que esto hace que se te escape una sonrisita al leer el pasaje que te recuerda la portada y eso, queridas/os mias/os, es algo que me encanta.
Los personajes, desde los protagonistas hasta los antagonistas pasando por los secundarios (sobre todo los que no habían salido en las anteriores novelas), como siempre, me han enamorado.
El conde de Lancashire, me ha llegado mucho al corazón por que, entre otras cosas, me ha recordado a mi propio abuelo paterno que, sin ser de la nobleza como el personaje, tenía un corazón tan grande como una catedral y siempre daba todo lo que podía con tal de ver a sus hijos y sus nietos felices. Quizá sea por que desde que empezó esta pesadilla de pandemia estoy más sensible, pero esta vez sí se me escapó la lagrimilla al ver a mi abuelo reflejado en el abuelo de Ken.
A Colin, el sobrino del conde, le cogí asco desde el primer momento. No me preguntéis por qué, pero me cayó gordo desde el principio con esa doble cara que muestra durante toda la historia y me alegré un montón de que, finalmente recibiera su merecido.
Algo que hace tiempo que no hago en las reseñas, posiblemente por que había perdido práctica con ellas, es referirme a personajes secundarios como los miembros del servicio. Históricamente no sé si alguna vez habrá sido así (supongo que alguna vez sí puede haberse dado), pero me encanta cómo Nieves Hidalgo trata a este tipo de personajes. En todas las novelas que he leído de ella, el personal del servicio es gente respetada por sus señores, querida, en muchos casos, casi como si formaran parte de su familia, algo que, de cierta forma es así y, a su vez, este cariño siempre es devuelto tanto tanto en afecto como en lealtad. En esta novela, esa cercanía es mucho más pronunciado si cabe y se nota. Pero, sin querer desvelar nada a aquellos que todavía no la han leído, voy al grano. Todos los personajes del servicio me han parecido magníficos. Cercanos y cariñosos.
En cuánto a los protagonistas... Creo que empezaré por Ken, el barón de Lancashire. A través de los recuerdos de la protagonista vemos cuánto ha cambiado la guerra a nuestro héroe. Sabemos que en su juventud ha sido un joven alegre, algo díscolo como todos los jóvenes de su clase, que enamora a las jovencitas con tan sólo mirarlo, tal cual le ocurre a la protagonista. Después, vemos cómo los horrores de la guerra han hecho mella en él y lo han convertido en un hombre duro y curtido. Pero también nos damos cuenta de que, a pesar de todo, su esencia noble (y no por los títulos), no ha cambiado nada, sino que se ha pronunciado aún más. Y eso lo vemos en el ahínco que pone en ayudar a otros sin importar la clase social. Duro, sarcástico algunas veces, pero seductor, encantador y amoroso la mayor parte del tiempo, ¿cómo no enamorarse de un personaje así?
Y llegamos al turno de Sabrina, nuestra heroína. Siendo absolutamente sincera, éste es el personaje que más me ha gustado de todos, el que me ha enamorado de verdad. Como todas las protagonistas de Nieves Hidalgo, Sabrina es una mujer fuerte, valiente, una adelantada a su tiempo, sobre todo, en la mentalidad. Su pasado difícil, el haberse visto en la calle al quedarse embarazada de un hombre al que no conoce más que de vista, no sólo no la hunde, sino que la hace más fuerte todavía lo que dice mucho de su carácter. Además, nunca olvida su educación ni renuncia a sus principios. Admirable, como poco.
La historia principal, la romántica, me ha parecido una de las más bonitas por el hecho de que es como un capricho del destino. Sabrina, con dicinueve años se enamora de un apuesto joven al que sólo ha visto de lejos y tiene el atrevimiento de guiarse por sus instintos más primitivos. Él, como hombre que no es de piedra, se deja llevar y se enamora de unos ojos violetas que le vuelven loco. Después, se separan, sin saber si alguna vez se volverán a encontrar y, casi seis años después, el destino quiere que vuelvan a encontrarse. Claro que, la situación en la que se vuelven a encontrar no es la más propicia para un romance; demasiados recelos por una parte y demasiados secretos por otra. Sin embargo, a pesar de todos los obstáculos, el corazón es traicionero y los sentimientos más aún, por lo que por fin terminan unidos el uno al otro, eso sí, en unas circunstancias de lo más curiosas y que yo, sinceramente, no me la vi venir pero que, creo que muy apropiada para la historia, quizá yo también me hubiera decantado por esa opción. Total, que al final es un placer ver cómo, a pesar de estar todo el día como el perro y el gato, terminan por dirimir sus diferencias, admitir los sentimientos que tienen el uno por el otro y teniendo su "felices para siempre".
Me ha encantado y, por supuesto, la recomiendo.
Y, bueno, esto es todo por hoy. Espero que os haya gustado la reseña u os haya servido de algo.
Nos leemos en la próxima reseña. Que paséis una feliz semana.
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Etiquetas: Nieves Hidalgo, Reseñas